domingo, 29 de agosto de 2010

-Domingosh con eshe-

Rossy De Palma fue con shus amigueses a tomar un té dominguero.
Hablaron de todo y hablaron de sexo, esto me excita, aquello es exceso. Sosteniendo platito en la palma y tacita en la mano, todo porcelana del Japón, contó intimidades adorables al tiempo que escupía un pedacito de torta de fiambre que sin querer salió expelido y se depositó pleno de baba en la frente de una vieja cotorruda. Cotorruda, sí.
-Shoy Rossy De Palma, no me ecsssita.
No le excita aquello. Confesó entusiasmada.
Sus pulseras doradas tintineaban en su muñeca y esos párpados caídos inconfundiblemente me reclamaban urgente un toque de desmaquillante aliviador para ojos cansinos. Todo eso,sí. Es que todo es intenso entre amistades toquetonas y comprensivas. Rossy se sintió plena like a virgin y recordó que hoy en el autobúsh se cruzó con Tona, antigua amiga ahora Potoca. Está toda Potoca dijo aquél, claramente refiriédose a su cara de pan casero. Que le pasa a la Tona? ultimamente,tal vez? parece que en todo este tiempo que pasé sin verla hubiera tenido tres hijos. La noté re madre, no me reconoció en el bondi y tenía puesto un buzito celeste y una cartera floreada. Tona,estás bien? se bajó, cruzó a la parada de enfrente y paró un ómnibus que iba hacia el otro lado. ????
yo la miré torciendo el pescuezo desde la ventanilla,azorada. Tiene una expresión confusa,la verdad no se en que anda, ya le preguntaré a Ana,la Tona antes tenía mucho más rock y ahora de golpe se echó veinte años encima.
Un día me enteré de casualidad que su verdadero nombre es María Toniana.
Rossy and friends habían hecho una canción y siempre que podían se la cantaban en toda ocasión que se prestara con unas copas y algunos humos de más:
To, To, Tona-Tona-Tona. Pocota, baila la Tona, Tona Potó
La Rossshy terminó su domingo durmiendo plácidamente luego de llenar previamente su estómago y por ende su alma. Alma y Estómago se dan la mano,en algún recoveco se toquetean,se hacen cosquillas. Y recuerdan la promesa que le hizo a la Roshy su amigo del alma. Un blog viperino sobre huecos y oscuridades estrafalarias.

-RUISE DOS-

martes, 24 de agosto de 2010

Hace un rato me acordé de cuando nos cosían las zapatillas a las medias. Me vino a la mente la imagen de las costuras, la madre de las mellizas dando puntadas en diagonal con doble hilo negro en donde las zapatillas de ballet de cuero se juntaban con las medias can can. Las zapatillas rosadas estaban un poco despintadas, a las tres nos había pasado lo mismo, el cuero estaba algo gastado y el elástico rosado también, a veces miraba los bordes y tenía la sensación de que habían sido mordisqueados por ratones.
Las medias de nylon quedaban arrugadas, con globitos en el lugar de la costura y las de la más grande eran de un rosado más tirando a fucsia y más transparentes también.

sábado, 14 de agosto de 2010

Ayer...

Me levanto a las siete de la tarde. Lo primero que hago es embutirme todo lo que hay arriba de la mesa. Empiezo por el chocolate. Chocolate blanco, espeso, lo deshago en mi boca. Hasta que quede blando, baboso, pegajoso. Suculento. Sucumbo lento, y después rápido, demasiado rápido. Y reprimo el misterio. Ni siquiera se jugar. Por un segundo reduje todas mis posibilidades al tentador pastel de crema y frutilla que descansa en la mesa, terminé conformándome con sabores mundanos. Hoy no creo probar el olimpo, mañana tampoco.

Cuestiono. Me alejo cada vez más de mí. O estoy tan cerca que me quemo. No hay más que un milímetro de distancia entre las bocas. Sin embargo, no muerdo, no beso, no como. Estoy llena. Vos en la guerra. Solo, ya no convida (ya no con vida). Lucho con la música que agarra mi cuerpo, música en todos lados siento. Bailo, para vos, y ese es el error. No me ves, no me cojés. Me olvido del anuncio que vi en la televisión, de los clichés del porno (sí, son clichés), y me masturbo mientras bailo. Si no hay dos cuerpos juntos, entonces hay uno y otro. Dos cuerpos distintos. Especies siniestras (¿cineastas?). Cine: en la pantalla son dos que se convierten en tres, o en cuatro...quiero saber más, pero sin preguntarlo. Deduzco por las formas, por las miradas, por como encastran, que fuiste uno con ella, y tres con él. Y prefiero que te vayas, que me dejes sola, que te acabes en su cara. No.

Termina la noche. Triste. Ya no es adolescencia, pero a vos te excita la maldita pendeja. Y para no quedarme atrás, meto en mi concha a todos los que pasan de los treinta, así jugamos a ver quién puede más. Quién pasa el límite.

No estoy acostumbrada a esto. Dentro de la luz que generamos, hay cuartos que tienen puertas con trancas, que no quiero abrir, que no querés abrirme. Y está bien que sea así. Me perturba el silencio. Pero prefiero el silencio, antes que el vacío. No me muestres el vacío, no lo quiero. Llenalo, no de oscuridad. Que abunda.

...dormí catorce horas de corrido, la cabeza en blanco, zumban los oídos. Me poso en la lágrima que está a punto de saltar de tu ojo. Y respiro por detrás, por detrás del telón de terciopelo rojo, lleno de polvo. Polvo blanco que entra y socava. Polvo blanco que te saco a fricción. Polvo.


(r.uno)
suspiros

jueves, 12 de agosto de 2010

buenos muchachos

los buenos y los malos hacen lo que quieren.
yo soy buena y a veces mala;
mala y a veces buena,
depende.
depende del lugar, de la hora, del momento...de verónica
(y vos marcelo, ¿sos malo o sos bueno?)


(observo las fotos que sacaste a otros sin querer indagar demasiado.)

una buena muchacha y un buen muchacho descansan en el pasto azul.
los ojos de morfina penetrantes.
escapan sus almas agitadas como corceles.

¿estás agitado en este momento?
yo un poco...debo confesar.
es el temperamento, el nudo, el limbo, el miedo...
el medio: de comunicación, de recepción, de.
¿es posible que exista un canal sin interferencias?

canal limpio y lubricado, dilatado al máximo.
todo entra, no hay filtro.

el buen muchacho toca una melodía medieval
la buena muchacha escribe esto, y aquello.

escriben, cantan, besan, se empapan, resbalan,
conjugan, crean, tocan, se tocan,

tocan una canción de los buenos muchachos.


(r.uno)

buena muchacha

jueves, 5 de agosto de 2010

De la niña bien.

Era una niña bien. Atendía siempre la clase de la maestra Pedorra, sin hacer objeción alguna ante tales disparates. Todos, todos los bichos nocturnos que se movían alrededor de Nadia, pasaban sus narices una y otra vez por el tarro blanco. Snif y al tacho, snif y al tacho. Nadia miraba y no llegaba a comprender el espectáculo.

Una niña, que de niña pasó a ser mujer. De un salto, se deshizo de la tapa mágica, en una habitación con aire a prostitución. Sacudiendo todo lo que nunca tuvo con un monstruo negro...como la cama tampoco alcanza, se arrastran por el campo, por el barro, y su vestido ya no es blanco. Siente sed, se levanta a las seis de la mañana con un hombre que derrama tinta por la boca. Llena la copa del líquido negro y bebe con ganas, con ganas de beber. Traga el contenido de una sola vez. Se aleja del cuerpo inmóvil, frío, desnudo, y se sienta en un rincón a llorar. Las lágrimas negras caen, ya no tiene cara de cuento. Se acerca al charco oscuro y observa su reflejo: “cara de niña bien”. No cree en nada, en nadie, Nadia no cree en ella misma.

Vuelve a su casa cansada, abrumada. Se dirige al patio y se sienta en la hamaca del jardín de las delicias. Con el vaivén siente la calma llegar, junto con el té que dejó Alicia esperando en la mesa, debajo del árbol de Tilo. Un duende baja de la rama más alta y peina su cabello. Lo acaricia con tanta ternura, con tanta delicadeza, que Nadia se duerme; y en el sueño ya no es ella, y en el sueño ya no es él.


(r.uno)

miércoles, 4 de agosto de 2010

Nôi

Cierra los ojos y se imagina que es una serpiente...

Llovía y me mojaba, en medio del caudal de crema. Me mojaba mi ardor.

Parada.
Al lado una cama que no participó. Me muevo, me muevo adentro. Afuera, se mueve mi pelo, se mueve mi voz...ahogada mi voz. Me asombro de lo bueno, de lo nuevo, del infierno. Y me tranquiliza tener tu calor. Hundo mi nariz en la parte más comestible de tu cuello, afilo mis uñas en tu espalda y siento adentro, demasiado adentro. Duele adentro, muerde adentro, quiero adentro, tengo adentro.


El grito era azul. Igual que tu beso, igual que tu lengua cuando baila. Un sonido metálico, disonante.

En medio del sótano húmedo hay una mujer desnuda. Una mujer de piel pálida, blanca, blanca como Nôi. Otros idiomas hablan, varios idiomas hablan, las voces que llenan todo de vapor. Espeso, cae el semen de su mano, mientras las lenguas, frías, heladas, nadan desesperadas.

“Outside it´s shining, outside it’s cold”...duermo profundo y lento.




(r.uno)

lunes, 2 de agosto de 2010

-a veces sueño en forma de canción-

"vos perdiste votos detrás de ese mostrador y querés recuperarlos más allá del jardín"

una vez más me desperté con una melodía sobrevolándome el cerebrito de huevo frito. era medio murguera la canción y me generó algo de intriga. ¿quién sería ese señor que perdió votos? se me ocurre que era médico, creo que en una parte mi sueño mostraba eso. doctor, acodado al mostrador. capaz corrupto y todo. alguna se mandó.definitivamente murguero

-Ruiseñora Dois-(con amor y un vaso lleno en ese bar de viejos alchólicos doctores uruguayos y murgueros)